V. El Budismo acerca de la Vida y la Muerte
Los budistas creen que la vida viene de un pasado sin comienzo. La muerte no es el fin del proceso, como tampoco el momento del nacimiento es el comienzo del proceso. Lo que consideramos como nuestra vida actual es sólo unaiteración de un proceso ilimitado de vida.

Vamos a usar una analogía: Si viajamos continuamente, hoy podríamos estar en Nueva York, mañana en Washington, y al día siguiente en Chicago. En el tercer día no te pueden localizar en Nueva York – podrías estar en Chicago, pero, ¿por cuánto tiempo? Una persona o un fenómeno aparecen y luego desaparecen. Casi de la misma manera, la muerte no es el fin de la vida. Es una transición, el final de un segmento de la vida. Lo que percibes como el fin de tu vida realmente da comienzo a otro período de la misma. No hay necesidad para ti de sentirte desilusionado en esta vida; no ha terminado realmente.

A. El Surgimiento y la Desaparición que se presentan en cada momento.

En cada momento del tiempo algo cambia en nuestra mente y cuerpo. Estos son nacimientos y muertes pasajeros. Sólo debido a que la forma física de nuestro cuerpo todavía está presente, es que no hacemos caso de dichos cambios diminutos. Las células de nuestro cuerpo, los pensamientos en nuestra mente, están sufriendo continuamente el proceso de nacimiento y muerte.

B. El Nacimiento y la Muerte más familiares para nosotros

Esto es el nacimiento que nos conduce a la vida de múltiples años y la muerte que lo acaba. En otras palabras, una vida.

C. El Surgimiento y la Desaparición de las tres vidas

Esto consta del pasado, el presente y el futuro. Las vidas pasadas son infinitas e innumerables, de igual forma las vidas futuras. Cualquier vida actual dada, entonces tiene una vida previa y, probablemente una futura.

La comprensión de la continuidad de la vida y de la muerte puede darnos esperanza y un sentimiento de conexión a través del tiempo y del espacio con otros y con nuestro propio ser. Este entendimiento ofrece una razón por la que vivimos esta vida, y muestra que el suicidio, por ejemplo, no es una solución verdadera. Es un escape de responsabilidad de las vidas pasadas y compromisos y no cesará de nuestro flujo en una vida futura. Al contrario, sólo provoca disturbios y dificultad en las vidas futuras.

El entendimiento de los procesos de la vida y la muerte puede ayudarnos a desarrollarnos y a madurar, y a mirar más allá de este momento particular y de nuestro propio interés. Podemos mirar la vida y la muerte de una manera completamente diferente. Con la ayuda del Budadharma podemos movernos más allá continuamente brincando de un lapso de vida al otro hasta el punto en donde ya no experimentamos la vida y la muerte como seres ordinarios, sino como sabios.

¿Qué es la transformación de nacimiento y muerte? Es la maduración final del mérito y la virtud, el logro de un Bodhisattva o un arhat. Esta transformación y maduración incluyen la sabiduría y la compasión. Incluso el cuerpo físico podría transcender al punto donde la energía mental será suficiente para cultivar el camino.

La Budeidad está más allá del nacimiento y de la muerte. Esta es la etapa del gran nirvana, transcendencia del cuerpo físico y realización del cuerpo del Dharma. El Buda puede aún manifestarse en cualquier forma, en cualquier momento, en cualquier lugar para ayudar a los seres sensibles que todavía están en el océano del nacimiento y la muerte. Estas apariencias que toma, todavía manifiestan el surgimiento y la desaparición, pero para el Buda no hay apego al nacimiento y a la muerte, y ninguna aflicción y sufrimiento se deriva de ellos.