Charla de Retiro de Siete Días (Día VII)

Por el maestro Chan Sheng Yen

Las siguientes charlas fueron impartidas por el maestro Chan Sheng Yen durante un retiro Chan de siete días en el Centro de Meditación Chan en Elmhurst (Nueva York) en 1992.

Charla de la Mañana del 5 de diciembre de 1992

Como el retiro está llegando a su fin, quisiera decirles a todos que la salud espiritual es mucho más importante que la salud física, y que la riqueza mental es una fortuna mayor que la material. Con esto no digo que la salud física y la riqueza material no sean importantes, sino, sencillamente, menos importantes.

Comprendemos el concepto de salud mediante el conocimiento de lo malsano. Comer en exceso o no comer lo suficiente es malsano. Tener demasiado frío o calor es malsano. Hacer poco o demasiado ejercicio es malsano. Eviten los extremos. Al igual que sucede con el cuerpo, una mente sana es aquella en la que los pensamientos, los estados de ánimo y las emociones son estables y equilibrados. El conflicto interno constante es malsano. Las reacciones excesivamente positivas a las alabanzas, así como las excesivamente negativas a las críticas, también resultan perjudiciales para el equilibrio mental.

Ustedes acaban de finalizar un retiro de siete días. Esta mañana le he dicho a uno de mis discípulos que debería cambiar su actitud hacia el resto de personas. Actuó de forma impulsiva e inmediatamente respondió: “Yo no soy así. Está culpándome de algo que no hago.” Esta no es una reacción sana. Anoche, durante el debate, una mujer dijo que cuando volviera a casa le daría un puñetazo a su marido por haberle transmitido ideas preconcebidas sobre el retiro. Estoy seguro de que solamente lo dijo por decir, pero estaría mal si lo hiciera de verdad.

Cuando se tiene el Budadharma dentro de uno mismo, esa es la mayor riqueza que se puede poseer. La sabiduría y la compasión también son fuentes de riqueza ilimitada. Esta mañana ustedes recibieron las Tres Joyas, lo cual significa que han tenido las Tres Joyas dentro de sí mismos. Eso vale mucho más que cualquier riqueza material, ya que la riqueza material es limitada por naturaleza. La riqueza material no puede salvarles de la muerte. Su Lear Jet  todavía puede estrellarse.

Sin embargo, no pueden arrebatarles la riqueza espiritual. Necesitamos la riqueza material para ganarnos la vida y las Tres Joyas para ayudar al prójimo. La salud física también es importante por una razón: con un cuerpo sano se puede practicar mejor. No obstante, no se debe enfatizar la riqueza material y la salud física. No deberían centrar la atención en su cuerpo de la misma manera en que un campesino se centra en alimentar a un cerdo. Al fin y al cabo, su objetivo es comérselo. Todos ustedes han trabajado con tesón durante siete días. A cambio, han recibido las Tres Joyas y riqueza espiritual. Yo diría que es un cambio justo.