Práctica diaria
Pregunta:
Shi-fu, Ud. al final de cada retiro siempre nos sugiere que continuemos regularmente nuestra práctica de meditación. Además de sentarnos, ¿qué otro tipo de práctica puede ser incorporada en nuestras vidas diarias? En sus enseñanzas usted siempre insiste en la compasión. ¿Hay una práctica de la compasión? ¿Cómo ésto se relaciona con la práctica de sentarse?

Shi-Fu (El Venerable Maestro Sheng Yen):
La práctica puede ser dividida en práctica periódica regular y práctica diaria. La práctica periódica regular puede ser además dividida en práctica individual y práctica en grupo. La práctica individual es para aquellos que son casi estables en ella, y que usan su método específico. Pueden dedicarle un tiempo cada semana, cada mes o cada año. La práctica en grup es similar, excepto que es hecha con otros.

Los retiros de 7 días de práctica Chan, la recitación de sutras y las ceremonias de arrepentimiento son ejemplos de práctica en grupo. Los practicantes serios deberían hacer una práctica regular periódica todos los años. Como su pregunta se relaciona solamente con la práctica diaria, podemos decir que es también de dos tipos: la práctica fija y la práctica en la actividad diaria. En la práctica fija, a un horario determinado, usted realiza su práctica formal. Se puede sentar, hacer posternaciones, recitar o leer sutras; realizar ceremonias matinales o al atardecer. Debe tener un horario regular al cual repetar. La práctica fija y estructurada es clara; pero ¿cómo debe Ud. practicar cuando está trabajando, en el conmutador, entreteniéndose, en su vida social, etc.?

¿Podemos practicar en todas estas ocasiones? Generalmente, cuando la gente piensa sobre la práctica viene a nuestra mente la meditación o el estudio del Buddhardharma, pero el Chan insiste en que esto lo debemos hacer en todo momento, tanto si practicamos de una forma estructurada como en nuestra rutina diaria.

Todos los momentos, situaciones y medio ambiente son oportunidades para practicar. En el Sutra Avatamsaka hay un famoso capítulo en forma de gatha (versos), del cual fueron extraídos los Tres Refugios. Este capítulo habla sobre todas las actividades humanas: comer, dormir, caminar, descansar, hablar, etc. Dice que en todas estas actividades deberíamos tener presente, constantemente, el bien de todos los seres vivientes. Esto es llamado la mente Bodhi o Iluminada. Esta enseñanza es la esencia de este capítulo. Una persona que está en el Camino de Bodhisattva pensará en ayudar a los seres vivientes. Este es el primero de los Cuatro grandes Votos de un Bodhisattva. Si ustedes pueden pensar en forma permanente sobre el bienestar de los otros seres vivientes, la compasión surgirá naturalmente en todos sus pensamientos y acciones. Los mayores problemas que un practicante enfrenta son la arrogancia, la mezquindad y el odio que se manifiesta cuando nos colocamos a nosotros mismos en primer lugar.

El que trasciende el orgullo y pone a los otros en primer lugar percibirá que la meta solo se alcanza con la ayuda de los seres vivientes. Solamente interactuando con los otros podemos vivir y crecer. Es también un error esperar gratitud cuando hacemos algo por los otros. En realidad, nosotros debemos agradecer a los seres vivientes por darnos la oportunidad de practicar la sabiduría y cultivar el mérito y la virtud. Sin los seres vivientes, un Bodhisattva no puede alcanzar la sabiduría. Por esta razón debemos ser agradecidos a todos. Si no los hemos ayudado debemos tratar de hacerlo; si sentimos que hemos hecho algo por ellos, debemos estar agradecidos. Esta actitud nos ayudará a prevenirnos contra el orgullo y la arrogancia.

Es muy fácil ver surgir en nosotros mismos actitudes de codicia, rabia, arrogancia y odio. La codicia surge cuando deseamos más de lo que realmente poseemos o deseamos lo que otras personas poseen. Ser mezquino o avaro es un producto de la codicia: lo que es mío yo no quiero dejarlo. La rabia viene del hecho de que las cosas no sean como nosotros deseamos; puede surgir cuando algo o alguien obstaculiza nuestro camino. Envidia y odio surgen cuando no podemos conseguir lo que deseamos. El odio puede surgir cuando alguien es muy parecido a nosotros o muy diferente. La arrogancia, que surge del orgullo, puede surgir si nosotros pensamos que poseemos algún tipo de logro espiritual u otra habilidad. Estos sentimientos surgen porque estamos centrados en nuestro ego y esto hace que nuestra vida parezca llena de problemas. Si nosotros dejamos que ellos existan sin investigarlos o sin la debida atención, entonces no estamos practicando.

Si podemos poner a los seres vivientes en primer lugar, la importancia que le damos a nuestro ego disminuirá. Por ejemplo, en el día de Acción de Gracias, le pedí a una persona de aquí llamada Chris, que viniese al Centro Chan y pasara la noche y parte del día trabajando en la impresión y edición de algunos trabajos. Chris aceptó, lo que significa que no es una persona que piensa en sí mismo en primer lugar. Pero la situación era más compleja de lo que parece. Chris trabajando en el Centro durante el feriado, puede ayudar a mucha gente pero quizás su familia no acepte de buen grado su ausencia. Por esta razón me disculpé ante él y su familia y le dije que esperaba que su esposa María no se enojara. Chris dijo que ella no tendría problemas tampoco y yo creo que es porque comprende que yo soy un hombre de edad que precisa de toda la ayuda que pueda conseguir.

María:
Yo me sentí afectada porque sé que es Chris el que necesita de mucha ayuda.

Shi-Fu:
Si es así, Chris debe estar agradecido porque yo le di la oportunidad de practicar y usted, María, le facilitó hacerlo. En todas nuestras acciones debemos observar si estmos beneficiando o no a los otros. De otra foma, cuando afloran sentimientos negativos, debemos reflexionar sobre ellos para saber si estamos hiriendo a los otros; debemos examinarnos antes de actuar. Si ponemos los intereses de los demás en primer lugar estos sentimientos egoístas no surgirán. Es muy difícil para la mayoría de nosotros pensar en beneficiar a los seres vivientes constantemente. Los seres vivientes incluyen a los animales y a la gente, pero en este caso yo estoy poniendo énfasis en los humanos.

Por ejemplo, si uno de los miembros de una pareja trabaja arduamente todo el día, posiblemente al regresar a su casa estará de mal humor. Por otro lado, si uno de los miembros tiene que cuidar su casa todo el día, también al final del día estará de mal humor. Estas dos personas del mal humor generalmente se verán envueltas en problemas. Pero si uno de ellos es capaz de percibir que el otro debe estar tan mal como él, puede ser más atento, paciente, tolerante y considerado. Tendrán menos problemas. Esto es un ejemplo de práctica apropiada; pensar menos sobre nosotros y más sobre otros. Este es el comienzo de la compasión.

En uno de mis retiros, tres mujeres compartieron una habitación. Una de ellas me dijo que solo había una cosa que odiaba y era que roncaran en su habitación y justo sus dos compañeras roncaban. Yo le dije: “puede ser que Ud. ronque tamibén.” Ella me dijo “yo preferiría morir a roncar.” Si ellas pudiese admitir que eso le podría ocurrir probablemente tendría más consideración por aquellos que roncan. Yo le conté una historia; Una vez pasé una noche en la misma habitación con otros dos maestros. Ambos roncaban, uno de una forma muy ruidosa y otro en un tono más bajo como si sufriese de asma. Esto me irritó y deseé sacudirlos, pero después pensé que podrían despertarse y no poder volverse a dormir. Desheché esta idea y en cambio imaginé que el más silencioso era un sapo que croaba en un pantano y el otro era un tigre rugiendo en la jungla, derecha un sapo, izquierda un tigre, sapo, tigre, sapo, tigre... y así me quedé dormido.

Recordé que antiguamente los maestros podían entrar en Samadhi solo escuchando el sonido del viento o el correr del agua. Pensé que si podía ser hecho con el viento y el agua, esto podría también ser hecho con un ronquido. Quizá yo no pude entrar en Samadhi, pero, finalmente me quedé dormido. Ser considerado con los otros es también una forma de meditación. No piense solamente en sí mismo y cuando esté pensando en sí mismo hago lo correcto.

Estudiante:
¿Cómo sabe Ud. lo que es correcto?

Shi-Fu:
Cuando tomen decisiones deben basarse en las enseñanzas del Buda. Si no están seguros si algo es correcto o no, si es bueno o malo, entonces traten de determinar si está de acuerdo con las enseñanzas budistas y con los preceptos. Si está de acuerdo, entonces háganlo. Si no está de acuerdo, entonces eviten hacerlo. Usen las enseñanzas budistas como una guia. Segundo, usen las leyes, la ética, la moral y las costumbres de la sociedad como una guia. Si sus intenciones concuerdan con las de la mayoría de la sociedad, entonces no estarán siguiendo una actitud equivocada. Usen el sentido común. Uds. Tamibén pueden pedir un consejo a su maestro del Dharma. Estén atentos al cambio de sus condiciones físicas y mentales. Vean como ellas afectan a sus pensamientos, palabras y acciones.

Generalmente, si nos sentimos enfermos o físicamente heridos no estaremos de buen humor. Todo el mundo parece feo si estamos en un mal estado mental. En estos momentos, parece que nada ni nadie nos comprende. Fácilmente nos enojamos. A pesar de esto, en cada momento, y con cada persona debemos tratar de dar origen a sentimientos de gratitud. La gente codiciosa generalmente no es consciente de su propia codicia. Lo mismo sucede cuando la gente siente rabia, arrogancia u orgullo. Pero más tarde o más temprano, los practicantes reconocerán que ellos han sido codiciosos, han sentido rabia o arrogancia. En ese momento, ellos deberán arrepentirse. Si usted puede hacer esto a cada momento, reconocerá que estos sentimientos, estos estados mentales no-virtuosos, surgirán cada vez menos.

Usted se arrepiente porque percibe que estos estados mentales resultan del fuerte apego a su ego. Por supuesto usted debe usar este apego para arrepentirse pero después, el grado de su apego al ego debería disminuir. Si la situación lo permite, es mejor arrepentirse frente a la imagen del Buda. Mientras se hace una reverencia o una posternación, usted debería reflejar las cosas que usted piensa o dice o que ha hecho equivocadas. Cuando Ud. tiene conciencia de sus errores, reconoce sus faltas y desea no volver a repetirlos. De la misma forma, cuando algo bueno suceda o alguien sea gentil con Ud., haga un esfuerzo consciente para ser agradecido.

En el templo de Taiwan, les dije a mis estudiantes que usaran dos palabras en sus vidas diarias. Siempre que ellos encuentren o reciban ayuda de alguien, deben decir “Amitofo, gracias.” Ellos no están dirigiendo sus agradecimientos al Buda Amitabha. Sus agradecimientos están dirigiendo a la persona que los ha ayudado, pero tamibién practican la recitación del nombre del Buda Amitabha. Para otros, decir solamente gracias es suficiente. La segunda palabra, dicha cuando se está consciente de una mala acción es, “discúlpeme”.

Decir “gracias” es ser agradecido y decir “discúlpeme” es estar arrepentido. Si la gente puede mantener sinceramente estas dos actitudes en sus mentes y llevarlas a la práctica, entonces tendrán pocos problemas. Si pueden hacer esto con una genuina preocupación por los seres vivientes, entonces la compasión surgirá. Para resumir: sea consciente del bienestar de los seres vivientes. Recuérdese a sí mismo no ser egoísta, arrepiéntase de sus malas acciones; sea agradecido con los demás.

Lo que he descripto es en realidad, la práctica diaria. Si Ud. lucha por mantener y practicar estos conceptos y los incorpora en la vida diaria, usted está haciendo práctica diaria. Al mismo tiempo, es importante continuar la meditación para estar más consciente de su estado mental. Si Ud. se dispersa y no tiene la disciplina para mantenerse atento, verá aflorar sus sentimientos negativos. Con la meditación como una disciplina permanente será más consciente de sus acciones, intenciones, sentimientos, estados de ánimo y pensamientos.

Estudiante:
¿Deberíamos colocarnos como un observador objetivo de nuestras mentes para vigilar nuestras intenciones, pensamientos, palabras y acciones y así conscientes de nuestra conducta?

Shi-Fu:
No, esto le produciría tensión y cansancio. Con la meditación usted gradualmente sentirá una calma interna, por eso en cualquier situación, no se debe exitar demasiado ni ser muy emotivo. Si su mente está relativamente apaciguada, naturalmente estará más consciente de sus pensamientos, y sabrá lo que decir o lo que no decir. No perderá el control. Cuando sea controlado por sus impulsos y emociones, en realidad estará fuera de control haciendo y diciendo cosas, antes de pensar en las consecuencias. Así es como comienzan los problemas para Ud. y para los otros.

De todos modos, trate de estar tranquilo, y ejercite el dominio en sus palabras y en sus acciones. Esto viene gradualmente, de la práctica regular de la meditación, de estar consciente durante la práctica diaria y de usar el Dharma o doctrina budista como guia de nuestra conducta. Por otro lado, si usted siempre se va a observar a sí mismo con ojos críticos, se volverá loco o si no será muy feliz. Si hay un observador constantemente analizando, no podrá sentirse cómodo. Si los concertistas siempre se observaran a sí mismos ejecutar el piano, no podrían tocar nada.

Estudiante:
Esta pregunta es sobre la compasión. Todos los días tomo el subte y veo una procesión de mendigos, personas sin hogar, gente enferma y ellos continuamente piden dinero. ¿Qué actitud debo tomar con estas personas?

Shi-Fu:
Esta es una pregunta difícil de responder porque cada situación es diferente. Depende de quién es Ud., de lo que puede hacer, de cuánto puede dar. Si Ud. es pobre y no tiene dinero, entonces no podrá hacer mucho. Quizás Ud. podría ayudar a una persona individualmente aquí o allí; dar comida a una familia sin hogar o ropa a alguien que no posee. Si Ud. tiene dinero, poder o influencia, entonces podrá hacer más. Quizás podría ayudar a construir una sociedad mejor o un medio ambiente más saludable. Pero Ud. debe recordar, independientemente de la clase de ayuda que pueda prestar, que encontrará a aquellos que rechacen ser ayudados, que no desean escuchar o que no quieren cambiar. Para el Budismo, Ud. debe hacer lo que pueda; dar lo mejor de sí mismo. Si nosotros simplemente usamos dinero para ayudar a esas personas, la ayuda será mínima. Nuestra ayuda financiera es mínima. Además, el dinero no los ayudará a eliminar la causa de haber llegado a ese estado.

Debemos decidirnos a mejorar el medio ambiente y ayudarlos a mejorar su karma, que los ha llevado a donde están ahora. Debemos ayudarlos a entender el principio de causa y efecto, para que entiendan y comprendan mejor su situación. De esta forma, podremos ayudarlos verdaderamente. El Budismo hace incapié en soluciones a largo plazo y se preocupa con los asuntos fundamentales para lograrlas. Nosotros, como practicantes, no podemos emplear soluciones de corto plazo. Debemos profundizar. Para esto debemos pensar como predicar el Dharma o doctrina de Buda.

Estudiante:
Esto no parece ser muy realista. La mayoría de esas personas no desean escuchar las formas en que podrían cambiar sus vidas. Es muy tarde. Aunque creyeran en vidas futuras estoy seguro de que ellos solo piensan en hoy y mañana no en los años por venir. No desean saber cuáles son las raíces de sus problemas. Quieren comida, ropas, abrigo, drogas, medicamentos. Esta gente necesita ayuda inmediata. ¿Está Ud. queriendo decir que debemos ser “evangelistas de esquina” y predicar el Dharma de Buda a los que pasan por allí?

Shi-Fu:
No, no deben evangelizar. Esta no es una costumbre budista. Esto traería más problemas para Ud., para los otros y para el Budismo en general. La mejor forma es practicar el Dharma de Buda. Si usted lo vive, entonces no tiene que predicarlo. Fluirá de Ud. naturalmente. Si Ud. tiene la mente generosa, el dar vendrá naturalmente. Aquellos que tienen afinidad con Ud. se beneficiarán. Esto es ayudar en el más alto nivel. No tiene que evangelizar. Si Ud. vive el Dharma de Buda, la gente vendrán a Ud.

Estudiante:
¿Qué sucede con el otro lado de la moneda? Supongamos que Ud. trabaja en un lugar muy competitivo. ¿Cómo se lidia con este lado de la competición en los negocios? Si yo me esfuerzo por ser mejor, ¿no estoy causando sufrimientos a los que compiten conmigo? Pero si yo ayudo a estos competidores esto significa que yo puedo perder mi trabajo o los negocios. ¿Cómo debemos actuar en estas circunstancias?

Shi-Fu:
La competición honesta no es necesariamente dañiña. Depende de su actitud. ¿De qué forma es Ud. competitivo? La actitud correcta es ir hacia adelante y al mismo tiempo desear que su competidor también dé lo mejor de sí mismo. Es como un encuentro de natación. Yo nado y Ud. nada. No tratamos de golpearnos mutuamente hasta eliminarnos uno de los dos, y después nadamos hacia la meta. Nosotros incentivamos el espiritu verdaderamente competitivo. Esto es saludable. Esto incentiva a practicar a niveles más altos. Un medio ambiente donde cada uno mutuamente estimule al otro es saludable. En cualquier área de competitividad, debe haber alguien que esté a la cabeza y alguien que quede atrás. Inevitablemente habrá otros que queden totalmente atrás. O sea que esa área donde se compite, no será para ellos. Ellos tendrán que buscar otro campo de actividad. Esto no es su culpa ni debe preocuparse por esto. Si Ud. está en un negocio o actividad no-ética, debe pensar en dejarlo. Su medio de vida debería estar de acuerdo con su concepto del Dharma.

Estudiante:
Constantemente pensar en el beneficio y bienestar de los seres vivientes parece ser un gran peso. ¿No podrá esto transformarse en un problema?

Shi-Fu:
No será un peso ni un problema para aquel que comprenda las enseñanzas del Dharma, especialmente el principio de causa y efecto. Cuando desee ayudar a otros, recuerde que los seres vivientes tienen sus propias causas y condiciones, su propio mérito y virtud, su propio karma. Ud. no puede cambiar esto. Ud. no puede tomar el karma de otra persona. Por ejemplo, hace dos meses, alrededor de 80 personas fuimos a la India. En Nepal, una mujer de edad del grupo fue golpeada y tirada por un búfalo y ella se rompió la pierna. A pesar de que su condición no era ventajosa insistió en continuar con el grupo. Ella dijo “deseo ir aunque muera en el intento.” Yo le dije: si Ud. desea morir, mejor hágalo en Taiwan.

Si Ud. viene con nosotros, el grupo entero sufrirá. Como budista debería entender el concepto de karma. Que Ud. haya sido golpeada por este búfalo puede significar que usted debe al búfalo alguna cosa de su vida previa, quizás su propia vida, pero porque Ud. estaba en esta peregrinación, usted solamente sufrió la rotura de su pierna. Este es su karma. Si Ud. insiste en continuar, será un peso para todo el grupo y Ud. solamente creará más mal karma para usted misma. Escuchando esto, ella decidió volver a Taiwan. La palabra llave es “trate”. Por supuesto Ud. no debería hacer nada que pueda herirlos, pero Ud. también debería tratar de ayudar. Si Ud. ayuda realmente o no es otra historia y esto verdaderamente debe ser su preocupación.

Estudiante:
Tratar de ser compasivo todo el tiempo puede ser mentalmente difícil de llevarlo a la práctica especialmente si esto debe machacarse en nuestro cerebro momento tras momento. ¿No sería esta una forma de cortar con otros pensamientos, palabras y acciones? ¿Podemos estar siempre pensando sobre otra gente? ¿Aún cuando estamos sentados en el toilette? Puede llegar a ser compasivo. ¿No hay otra forma en que podamos pensar sobre esto?

Shi-Fu:
No olviden lo que dije antes. No hagan nada que pueda hacerles sentir tensos, cansados o miserables. Si ustedes se exigen demasiado no servirán a los otros ni a sí mismos. Sean tan atentos o conscientes como puedan. Con la meditación como disciplina de soporte y el Dharma de Buda como su guia, la compasión crecerá naturalmente. Hagan lo mejor que puedan pero no se exijan demasiado.

Estudiante:
En líneas generales, el karma depende de la intención que haya detrás de las palabras o de las acciones. ¿Es posible sin alcanzar la iluminación, controlar nuestras intenciones y deseos para no crear ningún karma?

Shi-Fu:
Es posible, pero muy difícil. Yo supongo que así no sería capaz de interactuar con los otros. Las palabras pronunciadas y las acciones que realizamos sin una idea preoconcebida no crean karma. Pero yo no estoy seguro de que se pueda hablar y actuar sin desear hacerlo.

Estudiante:
¿Qué sucede si mato a un ser viviente sin saber? Por ejemplo, supongamos que estoy manejando en una calle oscura a la noche y un gato se desliza bajo las ruedas de mi auto antes de que yo pueda reaccionar? ¿Qué sucede con el karma?

Shi-Fu:
Primero, usted estaba manejando por propia elección. Segundo, esta situación se produjo por causas y condiciones y por su karma y el del gato. De todas formas, se ha creado karma; pero el karma es más leve que si Ud. hubiese matado al gato a propósito.

Estudiante:
¿Los pensamientos que van y viene crean karma?

Shi-Fu:
No, los pensamientos que vienen y van por sí mismos no crean karma. Solamente los pensamientos que surgen con deseo crean karma. Pero este karma es más leve que el creado por palabras y actos.

Estudiante:
¿Qué sucede con el deseo de elegir pensar sobre el método de la práctica o pensar al respecto del bienestar de los seres vivientes? ¿Crea esto karma?

Shi-Fu:
Sí, esto crea buen karma.

Estudiante:
¿Es posible participar de las actividades diarias y percibir el mundo como una cámara o un espejo-sin discriminar-sin ser un Iluminado?

Shi-Fu:
Existe la mente intuitiva y la mente que no discrimina. Son diferentes. La gente no ilumina, puede confiar en su intuición. Por intuición, quiero decir conocer, decir y hacer cosas directamente, sin depender demasiado del proceso intelectual. Con una mente que verdaderamente no discrimina no habrá problemas. Con la mente intuitiva, los problemas aún pueden surgir del subconsciente. Una mente intuitiva puede ser cultivada y fortalecida con la meditación. Esto no es Iluminación pero es un buen estado mental.

Estudiante:
¿Cómo practica Ud. cuando no hay tiempo suficiente para sentarse debido a un horario muy completo y otros obstáculos? Puede ser muy desestimulante.

Shi-Fu:
Si en su vida diaria, Ud. está muy ocupado, trate de encontrar pequeños espacios de tiempo para sentarse, relajarse y aclarar su mente. No es necesario hacerlo sobre un almohadón, y no es necesario hacerlo durante 30 minutos o una hora. Tómese tres o cinco minutos aquí o allá en su escritorio, en el auto, ómnibus o tren. Puede hacerlo en todo lugar o en cualquier momento. Relaje su cuerpo y su mente. Respire. Decante su mente. Deje su mente y su cuerpo refrescarse a sí mismos. Si su horario es demasiado corrido como para dejar aunque sea cinco minutos, entonces trate de relajar su mente y cuerpo mientras Ud. está trabajando o caminando o conversando. Haga funcionar su práctica. Esté consciente de lo que hace y dice. Yo hago esto. Cuando estoy en Taiwan no tengo tiempo para mi ni a la mañana ni durante todo el día hasta el anochecer. Pero siempre que recuerdo, trato de relajarme en cuerpo y mente. Trato de no dejar que los problemas me afecten. Dejo que vengan y se vayan. Si yo no hiciera esto, probablemente estaría muerto. Esto es algo que todos nosotros podemos hacer. Toma su esfuerzo y tiempó, pero no es muy difícil. Si yo lo puedo hacer, entonces ustedes tamibén.